Estado migratorio, tiempo de estancia y uso del castellano en la en la salud oral de los niños inmigrantes en españa

  1. VALCÁRCEL SORIA, RAQUEL

Universidad de defensa: Universidad Europea de Madrid

Fecha de defensa: 12 de mayo de 2017

Tribunal:
  1. Antonio F. López Sánchez Presidente/a
  2. Carmen Martín Carreras-Presas Secretaria
  3. Duarte Nuno da Silva Marques Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 525353 DIALNET

Resumen

El estudio de las enfermedades orales, principalmente de la caries, pone de manifiesto peores niveles de salud oral en los niños inmigrantes o con antecedentes migratorios en todo el mundo. La influencia de las variables representativas del nivel de aculturación, como la edad de llegada, el tiempo de estancia o el uso del idioma oficial del país de acogida, parecen demostrar que a mayor nivel alcanzado se produce una mejoría en la incidencia de caries. En España, las encuestas de salud oral que han analizado el estado de salud oral de los niños inmigrantes, ya sean autonómicas o nacionales, tienden a encontrar mayor prevalencia de caries y una mayor media de los índices de caries en estos niños en comparación con los autóctonos, aunque no en todos los grupos de edad, a pesar de referir mejores hábitos de cepillado. El objetivo de nuestro estudio es analizar la influencia del estado migratorio (primera y segunda generación de inmigrantes) así como de las variables representativas del nivel de aculturación (tiempo de estancia de padres e hijos, edad de llegada de los menores y uso del castellano) en la experiencia de caries, en los hábitos relacionados con la salud oral y en el tipo de asistencia odontológica demandada. De nuestros resultados se desprende que los niños inmigrantes o con antecedentes migratorios presentan mayores niveles de caries que los autóctonos. Sin embargo, tras ajustar por factores de confusión (edad, sexo, clase social, estado marital de los padres y nivel de educación de la madre) las diferencias desaparecieron para la segunda generación de inmigrantes. La condición de inmigrante se asoció a un mayor consumo de sólidos y bebidas azucarados entre comidas y a mejores hábitos de higiene oral y exposición a fluoruros. No encontramos diferencias en el tipo de asistencia demandada tras ajustar por factores de confusión. El tiempo de estancia de padres y niños, así como la edad de llegada de los menores se asociaron a peores resultados en niveles de caries. El uso de un idioma distinto al castellano en el hogar así como la menor capacidad lingüística de los padres se asoció a mayores niveles de caries de los menores y a mayor asistencia al odontólogo por causa urgente. Los mejores resultados en hábitos de higiene oral de los niños inmigrantes se limitaron a aquellos niños cuyos padres hablaban castellano. No obstante, el uso del castellano se asoció a mayor ingesta de sólidos azucarados entre las comidas. Estos resultados aportan cierta evidencia en la identificación de subgrupos con mayor riesgo de caries en la población inmigrante. No obstante, señalamos que hacen falta estudios con muestras mayores y probabilísticas que contrasten estos resultados y permitan establecer asociaciones por país de procedencia.