Análisis de los factores anatómicos que pueden determinar que se afecte el sistema de conducción av durante el reemplazo transcatéter de la válvula aórtica

  1. Macías Gañán, Yolanda
Dirigida por:
  1. Damián Sánchez Quintana Director/a
  2. Domingo Macías Rodríguez Codirector/a
  3. Yolanda Gañán Presmanes Codirector/a

Universidad de defensa: Universidad de Extremadura

Fecha de defensa: 10 de julio de 2017

Tribunal:
  1. Raquel Mayordomo Acevedo Presidente/a
  2. Domingo de Guzmán Monreal Redondo Secretario
  3. José Ángel Cabrera Rodríguez Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

El implante valvular aórtico transcatéter es el tratamiento de elección en pacientes con estenosis aórtica inoperables. Debido a la estrecha relación anatómica existente entre el sistema de conducción auriculoventricular y la válvula aórtica, la expansión de una prótesis valvular contra el aparato valvular aórtico, puede conducir a la aparición de alteraciones de la conducción, pudiendo resultar en bloqueo cardiaco parcial o completo y la necesidad de implantar un marcapasos permanente. Existen algunas variantes en las que el sistema de conducción se encuentra expuesto, siendo susceptible a lesiones, como: la variable posición del nodo auriculoventricular y el haz de His, la longitud del septum membranoso, la presencia de calcificaciones en los velos aórticos, el grosor del septum interventricular y la profundidad de la prótesis. En nuestro trabajo hemos estudiado 57 corazones con técnicas macroscópicas y de microscopía óptica, observando dichas variaciones y encontrando posible riesgo de lesión durante la implantación de la válvula percutánea debido a: un septum membranoso más corto en longitud en el 17,5% de los casos; una desviación hacia el lado izquierdo de la división del haz de His en 22 corazones; 10 corazones poseen un septum membranoso con un espesor ≥11 mm, a 6 mm de la cresta del septum muscular interventricular; la presencia de calcificaciones en el cuerpo fibroso central, septum membranoso y seno no coronario de la válvula aórtica en el 47% de los casos; y una fragmentación del nodo auriculoventricular en islotes de tejido de conducción en el 9% de los casos.