Factores relacionados con la mortalidad a largo plazo de una cohorte de pacientes que sobreviven 28 días tras un IAMEfecto de la aparición de diabetes mellitus durante el seguimiento

  1. Olmedo Llanes, J.
Dirigida por:
  1. Carmen Suárez Fernández Director/a
  2. Gema Vega González Director/a

Universidad de defensa: Universidad Autónoma de Madrid

Fecha de defensa: 30 de junio de 2017

Tribunal:
  1. José Ramón Banegas Banegas Presidente/a
  2. Jorge Aguilar Torres Rio Secretario/a
  3. Carlos Lahoz Rallo Vocal
  4. Jorge Francisco Gómez Cerezo Vocal
  5. Luis Antonio Álvarez-Sala Walther Vocal

Tipo: Tesis

Resumen

La cardiopatía isquémica es la causa principal de muerte en España y los países desarrollados. Si bien son múltiples los estudios de mortalidad a corto y medio plazo, poco se sabe del seguimiento y la mortalidad de los pacientes a largo plazo. Con el presente estudio queremos explorar los factores que condicionan la mortalidad a largo plazo de los pacientes que sobreviven a un infarto agudo de miocardio, poniendo especial interés al efecto que tiene el desarrollo de diabetes sobre la misma. Además investigamos cuáles son las causas de muerte en estos pacientes y su distribución Para ello hemos realizado un estudio ambispectivo con todos los casos incidentes de infarto agudo de miocardio (IAM) incluídos en el registro poblacional de IAM de la provincia de Albacete desde el día 1 del mes de septiembre de 1.997 hasta el 31 de Diciembre de 2.004 (ambos inclusive), y que sobrevivieron a los 28 días del evento. Además a partir de la firma de un convenio con el Instituto Nacional de Estadística obtuvimos la fecha y la causa de la muerte de los pacientes con un seguimiento a largo plazo hasta el 31 de diciembre de 2.014. Desde un punto de vista epidemiológico, tras una mediana total de seguimiento de 12,49 años (P25-75 7-15,1 años) hemos calculado la mortalidad de la cohorte de estudio en un 48% (IC95% 45-50%), con una mediana hasta la muerte de 5,12 años (P25-75 0,13 a 9,75 años). La causa más frecuente de muerte fue la de origen cardiovascular seguida por la neoplásica. Al analizar los factores que se relacionan con la mortalidad de los pacientes de la cohorte vemos como la presencia de factores de riesgo cardiovasculares clásicos, HTA o DM, la existencia de IAM previos al evento índice, o la aparición de ictus o re-IAM en los 28 días siguientes a un IAM, implican un peor pronóstico en los pacientes. Supone un aumento de la mortalidad global y de causa cardiovascular, además de relacionarse con una muerte más temprana. El tratamiento de reperfusión miocárdica y sobre todo, el uso de los betabloqueantes, aparecen como importantes protectores de muerte cardiovascular y global, afectando además, al momento en el que se produce la misma. Efecto este último, que también se ha relacionado con el uso de nitratos al alta. En los pacientes que sobreviven a largo plazo a un infarto agudo de miocardio existe una tasa de incidencia de DM de 15 casos por cada 1.000 personas/año (IC95% 10-21 casos), no estando la mortalidad a largo plazo (ni global, ni de causa CV) relacionada con este nuevo diagnóstico.