The animal withinAn ecocritical approach to the Gothic supernatural hybrid in the fin de siècle
- Eduardo Valls Oyarzun Director/a
Universidad de defensa: Universidad Complutense de Madrid
Fecha de defensa: 27 de septiembre de 2021
- Dámaso López García Presidente/a
- Luis Javier Martínez Victorio Secretario/a
- Ana González-Rivas Fernández Vocal
- Emily Bernhard Jackson Vocal
- Antonio Ballesteros González Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
Esta tesis estudia la figura del híbrido finisecular desde un punto de vista ecocrítico ya que se centra en el papel que juega el binarismo humano/animal en la construcción de la monstruosidad. Su principal objetivo es demostrar que no todas las narrativas góticas de finales de siglo representan al híbrido desde el miedo y el rechazo a la animalidad ajena y propia. Al contrario, este trabajo prueba que hay todo tipo de híbridos góticos que cuestionan las connotaciones negativas asociadas con la animalidad. Para probar esta hipótesis, analizo como están representados cuatro agentes sobrenaturales, el monstruo, el dios pagano, el fantasma y el doble, y los comparo con la descripción que se hace de los protagonistas o sujetos normativos. Esto permite discernir cual es el ángulo visual y ecocrítico a través del cual cada obra analiza al sujeto moderno. Finalmente, estudio como está representado el fenómeno de la influencia y su relación con la perspectiva visual y ecocrítica de cada narrativa. La tesis comienza con la figura del monstruo en Dracula de Bram Stoker, The Beetle de Richard Marsh y Alberic and The Snake Lady de Vernon Lee (Violet Paget). Después, se centra en la interpretación de la figura de los dioses paganos en The Great God Pan de Arthur Machen y el relato corto titulado `Dionea¿ de Vernon Lee. Tras el análisis de estos dos híbridos externos y tangibles, el argumento de la tesis avanza en la interiorización de lo animal con el capítulo sobre fantasmas; interiorización que culmina con el último capítulo dedicado a los doppelgängers. El tercer capítulo toma como referencias los relatos sobre fantasmas de M.R. James en Casting the Runes and Other Ghost Stories y los de Vernon Lee en Hauntings and Other Fantastic Tales, y el cuarto analiza la figura del doble en The Strange Case of Dr Jekyll and Mr Hyde de Robert Louis Stevenson y The Picture of Dorian Gray de Oscar Wilde. La perspectiva visual que adopta cada historia contribuye a definir el ángulo ecocrítico desde el que se representa tanto al híbrido como al personaje normativo y las interacciones entre ambos. Aquellas narrativas que suelen definir el sentido de la vista como el único epistemológicamente fiable tienden a representar la identidad desde una perspectiva cartesiana y ecofóbica; es decir, desde el miedo y rechazo a lo animal. Por tanto, mientras que la vista y la razón son considerados humanos, el cuerpo y el resto de sentidos son animales, y por ende, inferiores. En estas historias, la posesión de un `alma racional¿ o brújula ecofóbica se presenta como clave para distinguir a los seres humanos de los atávicos o degenerados. Finalmente, la influencia del híbrido se presenta como una fuerza imparable que reduce al protagonista a un comportamiento animal. Esta representación de la influencia como un fenómeno inevitable libera al sujeto influenciado de cualquier tipo de responsabilidad sobre sus actos, por lo que se desplaza la amenaza de la animalidad propia hacia un agente externo. Por otro lado, las narrativas proto-ecocríticas revelan que tanto la vista como la razón son parte del cuerpo animal y, por tanto, son capaces de irracionalidad. Así, arguyen que todos los sentidos son medios epistemológicos igualmente legítimos. El fenómeno de la influencia es representado como un intercambio cuyo éxito depende de la participación activa del sujeto influenciado. En otras palabras, para que la influencia del híbrido cause cambios en el comportamiento de los personajes se requiere la presencia previa de cierta animalidad en la denominada víctima. Finalmente, estas narrativas desvinculan la animalidad de la degeneración y la describen como un elemento inherente e inocuo. En su lugar, sugieren que la monstruosidad es el resultado de la represión sistemática de lo animal, por lo que el remedio contra la degradación social radica precisamente en la aceptación del animal interno