Caracterización clínica, molecular e inmunofenotípica del cáncer colorrectal en menores de 45 años
- Rogelio González Sarmiento Director/a
- Miguel Urioste Azcorra Director/a
Universidad de defensa: Universidad de Salamanca
Fecha de defensa: 22 de mayo de 2009
- Alberto Gómez Alonso Presidente/a
- Mercedes Robledo Batanero Secretario/a
- Manuel Hidalgo Pascual Vocal
- Felipe A. Calvo Manuel Vocal
- Manuel Lomas Espadas Vocal
Tipo: Tesis
Resumen
[ES] El Cáncer Colorrectal (CCR) de aparición precoz es relativamente infrecuente, con una incidencia del 2-8%. Este grupo de edad presenta un abanico heterogéneo de casos, desde aquellos con una agregación familiar importante para el CCR, hasta otros que son esporádicos. Parecen presentar características distintivas con respecto a aquellos que aparecen a edad más avanzadas, con una mayor frecuencia de localización en el colon derecho, bajo grado de diferenciación, mucinosos, presencia de tumores sincrónicos y metacrónicos, así como el estadio avanzado en el que suelen diagnosticarse. Una proporción de ellos presentan características similares a las de los CCR que suceden en el seno del síndrome de Lynch, manifestando a su vez la Inestabilidad de Microsatélites (IMS) en el tumor, siendo una parte importante de ellos portadores de mutaciones a nivel germinal en los genes del sistema de reparación de errores de emparejamiento del ADN (MMR). El segundo grupo, aquellos con Estabilidad de Microsatélites (EMS), poseerían un predominio de la vía de la Inestabilidad Cromosómica, equivalente a aquellos CCR esporádicos de edad más avanzada. Sin embargo, la caracterización del CCR en el adulto joven no está todavía del todo definida, tanto desde el punto de vista anatomo-clínico como molecular, siendo necesario caracterizarlos con respecto a aquellos CCR que aparecen en el síndrome de Lynch y frente al CCCR que aparece de forma esporádica en el anciano. En el presenta trabajo se han valorado 45 individuos que presentaron CCR a una edad igual o menor de 45 años, diagnosticados en dos instituciones hospitalarias diferentes de dos áreas geográficas distintas. En cuanto a las características del grupo en global, una proporción importante de los tumores se presentaron a nivel del colon derecho (44,4%), un predominio de tumores de moderado grado de diferenciación, pero con un porcentaje de tumores productores de moco a considerar (24,4%). Un tercio de ellos desarrollaron pólipos en su evolución. Destaca el diagnóstico tardío del CCR en este grupo de edad, con un 55,5% de los mismos que se presentaron en estadios avanzados de la enfermedad. El 40% de los casos mostró agregación familiar de CCR o neoplasias asociadas al síndrome de Lynch. Llama la atención que más de la mitad de los casos fueron diagnosticados en estadios avanzados (55,5%), presentando este aspecto, el retraso en el diagnostico, un peso importante en el pronóstico de los mismos. Otros aspectos parecen asociar también un mal pronóstico, como sería la localización izquierda a nivel del colon, o en principio, la activación de la ruta Wnt, o la falta de expresión de la ciclina E en los tumores. Desde el punto de vista molecular, el 31% de los tumores presentó IMS, siendo el 61% de estos, consecuencia de mutaciones germinales en MLH1 y MSH2. Estos tumores presentaron ciertas características diferenciales, como fueron la edad de diagnostico es más precoz, o la presencia mayor número de antecedentes familiares neoplásicos. También parecen tener un mejor pronóstico, aunque en un subgrupo de ellos, esto no se cumple (aquellos con células en” anillo de sello” o con falta de expresión de p53). Desde el punto de vista de la selección de los pacientes candidatos para el estudio de los genes de reparación, la inestabilidad de microsatélites con Bat26 y la inmunohistoquímica de las proteínas de reparación serían herramientas útiles. A la hora de aplicar los hallazgos en este tipo de tumores en el manejo terapéutico y de seguimiento del CCR en este grupo de edad, hay que considerar la asociación de pólipos y como la frecuencia de neoplasias sincrónicas y metacrónicas (6,7%), y por tanto, condicionan la necesidad de un seguimiento especial, de igual modo que las técnicas quirúrgicas, que en algunos casos serán más extensas que las llevadas a cabo en el CCR esporádico en el anciano.